José Ignacio Asensio: “Esta renovación refuerza la situación de Gipuzkoa a la vanguardia en recogida selectiva y tratamiento de residuos, eliminando la necesidad de vertederos y promoviendo un modelo sostenible que refleja el compromiso de los guipuzcoanos con la protección del medio ambiente”.

El Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) ha inaugurado hoy la remodelación de la planta de clasificación y separación de envases de Urnieta, un hito que marca la culminación de la puesta a punto de todas las instalaciones de tratamiento de residuos bajo su gestión. El acto, celebrado en las instalaciones de la planta, ha contado con la participación de José Ignacio Asensio, presidente de GHK y diputado de Sostenibilidad; César Gimeno, director general de GHK; Joachim Domroes, CEO de Trienekens y Pedro Goicoechea, director general de Trienekens.

Durante el evento, se ha destacado el esfuerzo realizado por Trienekens, operador responsable de la planta, para llevar a cabo una renovación que ha requerido una inversión de 800.000 euros por parte de GHK, consolidando a Gipuzkoa como referente en recogida selectiva y tratamiento de residuos urbanos a nivel nacional.

El presidente de GHK, José Ignacio Asensio, ha subrayado que esta renovación sitúa a Gipuzkoa “a la vanguardia en recogida selectiva y tratamiento de residuos, eliminando la necesidad de vertederos y promoviendo un modelo sostenible que refuerza el compromiso de los guipuzcoanos con la protección del medio ambiente. Gracias a esta inversión, mejoramos la productividad, seguridad y calidad del tratamiento, mejorando nuestro reciclaje de envases y reforzando nuestro compromiso con el modelo de economía circular”.

Una planta clave en la gestión de residuos guipuzcoana

Tratando 15.000 toneladas anuales de envases, la planta de Urnieta se suma a la renovada planta de Legazpi, que fue actualizada en 2018 con una inversión de 3 millones de euros. En conjunto, ambas instalaciones permiten gestionar 26.000 toneladas anuales de envases, enviándolos a recicladores separados por tipo de material y asegurando la máxima eficiencia en el proceso.

El esfuerzo conjunto de la ciudadanía y las instituciones ha llevado a Gipuzkoa a alcanzar una cifra récord en la recogida selectiva de envases a través del contenedor amarillo: 33 kg por habitante al año, casi el doble de la media nacional. Esta posición de liderazgo refleja el compromiso del territorio con la sostenibilidad y la economía circular.

Cabe señalar que, en 2022, la tasa de reciclaje del territorio alcanzó el 54%, lo que supone un incremento significativo de más de 12 puntos con respecto a 2015. Este dato sitúa a Gipuzkoa a un paso de cumplir el objetivo europeo del 55% para 2025, consolidando al territorio como referente en la gestión de residuos a nivel estatal y europeo. Asimismo, la recogida selectiva, con un índice del 60% en 2022, confirma el éxito de los sistemas implantados en el territorio, la conciencia ciudadana y de las infraestructuras puestas en marcha por GHK.

Visita a las instalaciones renovadas

Tras los discursos inaugurales, los asistentes han realizado una visita guiada por las instalaciones, donde se han presentado los detalles técnicos de la renovación. Entre las mejoras realizadas destacan la mejora de la zona de recepción de envases, la conexión de las dos naves de proceso incrementando la productividad, el cerramiento completo de toda la instalación y el refuerzo de las condiciones de seguridad, que permiten un aumento en la calidad y eficiencia del reciclaje.

La planta de Urnieta se erige así, como un ejemplo del modelo guipuzcoano de gestión de residuos, que continúa marcando el camino hacia un futuro más sostenible.